Hola, soy Monica karcz, Nací en París y me casé en España donde he dado a luz a mis 4 hijos. Hoy tengo la certeza de que cuidándome y sintiéndome bien conmigo misma, haré felices a los que me rodean y en busca de ese estado físico y mental encontré a mis mejores aliados; el deporte, del que he hecho pasión a mi madura edad y una equilibrada y sana nutrición.
Me licencié en Biología Genética y microbiología en la universidad de Burdeos, estudios que convalidé en el ministerio de educación español, Y en Barcelona hice un Máster de posgrado en gestión ambiental y auditoria. En la fundación ADA del fondo Europeo, bajo estos conocimientos y los de gestora de calidad diplomada, he desarrollado mi carrera profesional ocupando puestos de responsabilidad en diferentes empresas y es hoy… Que me siento si cabe más realizada, ayudando a las personas a conseguir mejor calidad de vida y sentirse tan bien como se merecen, en mi nueva dedicación como consultora de nutrición y bienestar.
Un Secreto…
Voy a contarte, qué me ha llevado a acercarme a personas como tú y hablaros de calidad de vida y salud.
He aprendido de mis andaduras, desde siempre con la obsesión del peso, figura etc… De joven estudiaba y hacia poco deporte, bueno vivíamos en el campo y ahí si era muy activa, ayudando en el campo a mis vecinos y en la huerta a mis padres.
Conocí a mi marido mientras yo estudiaba, mientras él hacía un curso en Burdeos, ahí nos conocimos y fue un flechazo….
Después de acabar mis estudios vine a Albacete y como previsto nos casamos.
Estuvimos unos años sin tener hijos y yo muy activa arreglando mi casa en el campo como buena Francesa, también yendo al gimnasio (aun que en esta época no era algo que me gustaba y lo asumía como una obligación).
Luego empezamos a tener nuestros hijos muy hermosos cada uno con casi 5 Kg al nacer y después de cada embarazo he cogido (o he dejado de perder) muchos kilos, a causa de una mala nutrición y de no tener tiempo para hacer deporte.
Todo el tiempo que tenía se lo dedicaba a mis hijos, sus comidas, sus juegos y actividades extraescolares además de las tareas de la casa donde en los periodos mas duros conté con ayuda exterior pero no conseguía liberarme porque tampoco podía desconectar de mi profesión; haciendo estudios y trabajos en medioambiente, durante dos años dirigí una investigación sobre la cría en cautividad de los caracoles serranos, e impartí cursos para la creación y explotación de granjas de caracoles…..
Con todo este descontrol, llegue a pesar en algún momento 120 Kg (nunca lo he comentado a nadie, por vergüenza).
Estaba siempre muy cansada, me costaba levantarme por las mañanas pero como había que preparar los niños para el cole pues nada se sacaban fuerzas de donde no podía haberlas….
Intentar dar el 100% en todo, era una utopía, intentaba hacerlo lo mejor que podía, pero poco a poco, cada vez, se me hacía más cuesta arriba. Si eres madre, seguro que me entiendes.
Siempre ha sido una lucha con la comida, cuando tenía un disgusto, comía, que me encontraba muy baja de ánimos, comía; una lucha constante de sentimientos y cabeza, contra el estómago y entonces hacia aparición la tan temida ansiedad que me hacía comer y engordar, engordaba porque comía, tenía ansiedad, comía más, no quería pensar, comía, me daba depre, comía….¿Te ha paso esto a ti alguna vez ?
El caso es que mi vida, la que yo sentía como mía hace unos años, se había ido a algún lado, con mi figura, acompañadas de mi energía, paciencia y juventud
No vayas a pensar que no era una persona feliz, todo esto que sentía, intentaba armonizarlo al máximo posible. Tengo 4 hijos maravillosos, una familia cariñosa…. Pero siempre estaba cansada, no tenía paciencia y enfermaba con frecuencia, me dolía la cabeza a menudo y no me cuidaba como debía, o no tenía tiempo, o no tenía ganas.
Hasta que un día, me vi frente al espejo, y me asuste, me vi mayor y descuidada, pensaba que igual no iba a ser posible recuperarme y verme otra vez una mujer atractiva, con energía y cuidados. Empecé a buscar por internet, leía libros, fui a ver a médicos, probé dietas y casi todos los productos del mercado. Si algo tenían en común esos métodos es que: o los dejaba, o los acababa siempre igual, con menos energía que al comenzar. No podía ser, reunía fuerzas y empezaba una dieta o un remedio y aniquilaba las pocas ganas que me quedaban, tomaba sustitutivos de comidas, comprimidos naturales…. La dieta de la piña, de la zona, disociada…. Creo que no me dejé ninguna sin probar. Algunas funcionaban, adelgazaba al principio y luego recuperaba más o, comenzaba a tener más energía, pero no dormía…
Estaba tan harta de eso, que empezaba a conformarme con mi “nuevo yo”, simplemente empezaba a aceptar que, para mí, era imposible cambiar mi figura o el nivel de energía, empezaba a pensar que iba a estar mejor acallando esos deseos de volver a sentirme más atractiva, ya tenía una buena familia, ya era más mayor, ya era madre!…. Una no puede quererlo todo en la vida ¿no?
¿O sí? ¿Qué crees tú?
Menos mal que en el proceso encontré el deporte. “Mens sana in corpore sano” dice la expresión latina. Me encanta la zumba, correr (que esto es otra interesante historia que os contare de mi debut con este deporte), hacer bicicleta…… y también, siempre cuento con la compañía de mi hija y ella, con la mía.
Fue simple, pero a la vez, realmente difícil darme cuenta de la solución y dejarme ayudar. A través de una buena amiga, encontré unos profesionales que me dieron el apoyo, las herramientas y unas sencillas rutinas que necesitaba incorporar a mi día a día.
Después de tantas dietas, mi metabolismo y sistema hormonal, estaba por los suelos, o sea, que fue un camino largo, pero ya notaba desde los primeros siete días, que mi nivel de energía, subía y ya no bajaba, veía resultados y eran sostenidos en el tiempo, no estaba resultando nada complicado, eran rutinas muy sencillas y rápidas. Empecé sin darme cuenta a cambiar mis hábitos, beber mas agua, exigirme menos, mi salud y la de mi familia empezó a cambiar, estaba feliz!
Gracias a una cuidada nutrición dejé en el camino unas alergias de primavera muy molestas……
Las personas de mí alrededor me empezaban a preguntar ¿Monica, que has hecho? Cada día se te ve mejor, más joven, mas enérgica.
Ahora me dedico a ello. Y tengo la enorme satisfacción de apreciar resultados ayudando a personas como tú, a tener la mejor calidad de vida que puedas conseguir, para lograr transformar tu vida. Me hace muy feliz ver como a través de mis consejos y con un poco de ayuda, puedes conseguirlo.
¡Mamá de cuatro y Feliz con mi cuerpo y con mi espíritu!