A pesar de que la cúrcuma es conocida sobre todo por su uso como especia en la cocina tradicional asiática, también es utilizada en la medicina natural debido a sus propiedades beneficiosas para nuestra salud.
En los últimos años la investigación científica en torno a la cúrcuma se ha intensificado, pero aún podemos decir que está dando sus primeros pasos. En este artículo analizamos esta planta y las propiedades medicinales que podrían derivarse de su consumo.
1- ¿Qué es la cúrcuma?
La Cúrcuma longa es una planta de la familia de las zingiberáceas, a la que también pertenecen el jengibre y el cardamomo. El extracto de la raíz (o rizoma) de cúrcuma se utiliza tanto para la gastronomía como para la medicina natural.
“Kurkum” significa “azafrán” en el idioma árabe clásico. Este nombre se debe a que, como el azafrán, esta especia tiene un color amarillo intenso y se usa como colorante y condimento para comidas como el arroz, la carne, las salsas o las sopas. Además, es un componente habitual del curry.
Debido a sus propiedades medicinales, la cúrcuma ha sido empleada desde la antigüedad en el sur de Asia, de donde es originaria la planta. Tanto la medicina Ayurveda de la India como la medicina tradicional china utilizan la cúrcuma en numerosos remedios naturales.
2- Beneficios y propiedades atribuidos a esta planta
La investigación científica sugiere que la cúrcuma tiene diversas propiedades medicinales. No obstante, es importante tener en cuenta que buena parte de los estudios realizados son considerados un fraude por muchos expertos.
En muchos casos estos potenciales beneficios han sido atribuidos a la curcumina, uno de los componentes químicos de la cúrcuma, pero tampoco parece estar claro que éste sea el factor clave.
Ayuda a adelgazar
Las investigaciones parecen indicar que, si se usa como condimento de forma habitual, la cúrcuma contribuye a bajar de peso porque inhibe el crecimiento del tejido graso y dificulta la lipogénesis, es decir, la conversión de azúcares en ácidos grasos.
En cualquier caso, la evidencia científica en cuanto a las propiedades adelgazantes de la cúrcuma todavía es poco sólida, por lo que no podemos afirmar que sea verdaderamente útil en este sentido.
Embellece la piel
Entre las propiedades positivas para la piel que se atribuyen a la cúrcuma se encuentran la reducción de las arrugas y de la inflamación de la cara, la mejora de la piel grasa, la inhibición del crecimiento del vello facial, la prevención del acné producido por bacterias y virus, la exfoliación de la piel y la eliminación de la caspa.
Alivia los problemas digestivos
La cúrcuma ayuda a digerir y reduce síntomas estomacales e intestinales derivados de digestiones pesadas, en especial de alimentos ricos en grasas, aliviando así los gases, la hinchazón o la acidez.
También es útil para tratar trastornos digestivos como el síndrome de intestino irritable y la dispepsia, que se define como un malestar que aparece en la zona superior del vientre después de las comidas; el estómago de las personas con este problema no se relaja cuando recibe el alimento, como sería lo normal.
Previene la reaparición de colitis ulcerosa
Estudios con personas diagnosticadas de colitis ulcerosa parecen indicar que el consumo de cúrcuma reduce el riesgo de reaparición de los síntomas después de la remisión.
Sin embargo, otras investigaciones afirman que la cúrcuma no es beneficiosa para las úlceras de estómago, sino que de hecho incrementa el ácido estomacal y puede agravar los síntomas existentes.
Reduce el dolor por artritis
Si bien se ha sugerido que las propiedades antiinflamatorias de la cúrcuma pueden aliviar el dolor de la osteoartritis, la artritis reumatoidea el síndrome del túnel carpiano, entre otros trastornos similares. No obstante, los estudios al respecto no son del todo concluyentes.
Mejora la función del sistema inmunitario
Lo cúrcuma incrementa la eficacia de nuestras defensas a nivel general; describimos algunas consecuencias de este beneficio en los siguientes puntos. Según estudios con animales podría ayudar a curar infecciones de virus y bacterias, pero este efecto aún no se ha estudiado en personas.
Protege el corazón
Algunas investigaciones con animales indican que la cúrcuma puede prevenir la formación de placas de colesterol y de coágulos de sangre, ayudando así a tratar la aterosclerosis y otros problemas circulatorios.
Este efecto protector contra problemas cardiovasculares se ha atribuido a la reducción de la muerte de células. No obstante, cuando esta propiedad se ha investigado en humanos no se ha podido probar la hipótesis.
Ayuda a prevenir el cáncer
Las propiedades antioxidantes de la curcumina y otros componentes de la cúrcuma protegen las células, lo cual se ha relacionado en ocasiones con una reducción indirecta del riesgo de sufrir cáncer de mama, próstata, colon, duodeno y piel.
En cuanto al tratamiento del cáncer, este efecto no sustituiría en ningún caso a la terapia farmacológica, sino que, en todo caso, podría usarse como complemento. Asimismo, la cúrcuma podría ser eficaz en el alivio de los efectos adversos de los medicamentos para el cáncer y de la quimioterapia, como las náuseas y los vómitos.
Previene enfermedades neurodegenerativas
Las propiedades antioxidantes y antiinflamatorias de la cúrcuma podrían ser beneficiosas para prevenir y reducir los síntomas de enfermedades como la de Parkinson, la demencia de Alzheimer y la esclerosis múltiple.
Es beneficiosa para el hígado
Las propiedades medicinales de la curcumina se relacionan con la protección de enfermedades hepáticas. Entre estas se encuentran el hígado graso, la hepatitis, la cirrosis o los problemas de la vesícula biliar.
Mejora la respiración
La cúrcuma expande los vasos sanguíneos, por lo que ha sido utilizada por la medicina Ayurveda para tratar problemas respiratorios como alergias, asma y bronquitis, así como el resfriado y la tos.
Es un antidepresivo natural
Aunque no está claro de qué modo tiene lugar este efecto, estudios con ratones muestran que la cúrcuma regula los niveles de neurotransmisores implicados en la depresión: la serotonina, la noradrenalina y la dopamina.
Esta propiedad es muy similar a la de los fármacos antidepresivos e incluso se ha sugerido que la cúrcuma puede ser más útil que algunos de ellos, si bien los datos disponibles actualmente no permiten confirmarlo.
Regula el ciclo menstrual
Se atribuyen a la cúrcuma diversas propiedades beneficiosas relacionadas con la menstruación. Además de ayudar a normalizar los ciclos irregulares y los niveles de hormonas, aumenta el flujo y reduce el dolor, como el que se produce en el síndrome premenstrual.
3- Como podemos tomarnos la cúrcuma
polvos, como condimento culinario,
Con el que aromatizar platos y guisos diversos, de hecho, es uno de los principales componentes del curry.
En infusión de los polvos,
Generalmente asociada a otras plantas, 20 g por litro de agua, tres vasos diarios en tratamientos discontinuos.
Para preparar un té de cúrcuma, hierve 1 taza de agua y disuelve 2 g de cúrcuma en polvo. También puedes añadir limón, miel y jengibre para mejorar el sabor del té.
Si el té no es tu bebida favorita, también puedes añadir una cucharadita de cúrcuma en polvo en un vaso de leche con la finalidad de añadirle antioxidantes y propiedades antiinflamatorias.
Aceite de cúrcuma
Aplicado externamente sobre la piel inflamada, como fungicida o repelente de insectos, pero también en masaje sobre miembros doloridos a causa de inflamaciones reumáticas y contracturas musculares.