Descubre los sorprendentes beneficios de la menta
Entre sus beneficios ayuda a calmar el estrés, mejora la circulación y combate las afecciones respiratorias.
Además de tener un aroma único, la menta forma parte de la medicina natural por sus grandes propiedades antisépticas, descongestionantes y estimulantes. Te invitamos a descubrir todos sus beneficios de la menta para la salud.
Beneficios de la menta para la salud
Mejora la digestión
La infusión de menta se utiliza para aliviar las digestiones pesadas debido a su efecto digestivo.
Evita los gases
Gracias a su acción carminativa.
Alivia los dolores de cabeza
Aplicar unas gotas de aceite de menta en las sienes y en la nuca es un remedio efectivo contra la cefalea.
Trata la gripe y los resfriados
Es un remedio natural muy utilizado en caso de bronquitis, tos o resfriados. Por su acción descongestionante, el mentol ayuda a disminuir la congestión de los pulmones, nariz y garganta. También trata la tos y el asma.
Elimina los hongos de piel y uñas
La menta es antifúngica por lo que aplicarla de forma tópica en forma de aceite esencial o en emplastes, puede eliminar los hongos de las uñas y de la piel de forma efectiva.
Alivia reacciones de la piel
Puede aliviar los casos de dermatitis, eczema y urticaria aplicándola de forma tópica.
Reduce la inflamación y el dolor
Sobre todo en caso de golpes, esguinces, artritis y dolencias crónicas.
Quita el mal aliento
Además reduce las bacterias en la boca que causan el mal olor.
Mejora la circulación de las sangre
Esto se debe a sus propiedades anticoagulantes, por ello alivia el dolor de cabeza, la hinchazón de las piernas, etc.
Trata infecciones vaginales
Además alivia la picazón y el escozor derivados de la infección.
Aumenta la líbido
Gracias a sus propiedades estimulantes y tonificantes, la menta puede ser un efecivo afrodisíaco natural.
Consejos y contraindicaciones del consumo de menta
Su aceite esencial no se debe usar durante el embarazo o la lactancia.
Su uso por la noche puede producir insomnio en algunas personas.
El uso de aceite esencial de menta no está recomendado durante el embarazo y la lactancia, ni en niños menores de 6 años.
El aceite se ha de aplicar mezclado con un aceite como el argán o el aceite de coco, nunca directamente sobre la piel.
No se recomienda beber en infusión a personas que tengan acidez, hernias de hiato, reflujo gástrico o cálculos renales.